A lo largo de la historia, la actividad física y el deporte formaron parte y son de gran importancia en la vida del ser humano. Al principio, tenían que ver con la protección y la supervivencia como por ejemplo la lucha, la pesca o correr.
Con el tiempo se le fue dando lugar a una faceta competitiva, lúdica y de superación, convirtiéndose en algo vital y diario. Actualmente, es una parte fundamental en el desarrollo de nuestro organismo y del correcto funcionamiento, tanto físico como mental.
En este sentido, contribuye a una adecuada maduración del sistema músculo-esquelético y de sus habilidades psicomotoras. Además, favorece la prevención de patologías como la obesidad, la diabetes y la hipertensión, y protege nuestro sistema locomotor.
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También colabora en la lucha diaria contra el insomnio, el estrés, la depresión o en la estima personal. Sin embargo, la práctica de ejercicio físico, lleva aparejado el riesgo de lesiones.
Conceptos generales
Las lesiones deportivas se pueden definir como las alteraciones que ocurren durante la práctica del ejercicio físico y se pueden clasificar según su localización anatómica.
Uno de los factores que más influencia tiene sobre las lesiones es la preparación física, motivo por el cual, es importante el asesoramiento profesional y multidisciplinario. Además, la nutrición cumple un rol fundamental en el desempeño y favorece la prevención de lesiones.
Los excesos o sobre entrenamientos generan un estado de estrés físico, que puede traer como consecuencia el aumento de la vulnerabilidad a sufrir lesiones. Las lesiones pueden ser: musculares, articulares, tendinosas y ligamentosas. Cada una de ellas va a tener un tratamiento específico.
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A pesar de que el deporte es esencial en la calidad de vida de las personas, es importante que se realice bajo los parámetros adecuados, a fin de evitar lesiones. Se deben interpretar las señales del cuerpo, priorizar el dolor y hacer consulta precoz con especialista. Esto favorece la prevención de lesiones más graves y permite volver al deporte en forma rápida.
¿Qué pasa con niños y adolescentes?
El aumento en la actividad deportiva en niños y adolescentes derivó en un aumento de las lesiones atribuidas al deporte y adquiere una especial relevancia, el aumento en la última década de la práctica de deporte a nivel competitivo.
Se incrementó el tiempo y la intensidad de la actividad física, generando aumento en la incidencia de lesiones agudas, subagudas y de sobrecarga del aparato locomotor.
El aparato locomotor en crecimiento presenta condiciones estructurales y funcionales muy particulares que hacen que el tipo de lesiones difieran sustancialmente a las que se presentan en el adulto. Debido al aumento de lesiones, las ciencias aplicadas al deporte, trabajan arduamente en la prevención de los cuadros más frecuentes.
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Las escuelas deportivas deben revisar los aspectos más importantes de las principales lesiones deportivas, desarrollando pautas de salud física, con diagnóstico precoz, terapia oportuna y pronóstico saludable.
Las lesiones deportivas ocurren durante la práctica de un deporte o durante el ejercicio físico y pueden dejar fuera de juego por varias temporadas a los jugadores profesionales, pero también pueden afectar a aquellos que practican actividad física con regularidad.
Causas más frecuentes
Accidente y mala práctica de entrenamiento o del gesto deportivo.
Uso inadecuado del equipo de entrenamiento o indumentaria.
Falta de una condición física adecuada.
Falta de ejercicios pre y post competitivo.
¿Qué debo hacer si me lesiono?
Nunca aguantar el dolor de una lesión deportiva.
Dejar de jugar o hacer ejercicio cuando sienta dolor. El continuar solo puede empeorar la lesión.
Algunas lesiones deben ser inmediatamente examinadas por el médico.
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¿Cómo se pueden prevenir las lesiones deportivas?
Evaluaciones periódicas con el fin de asegurar la correcta preparación para realizar ejercicio, sin riesgo.
Utilizar equipamiento adecuado (casco, protectores, etc.).
Use ropa técnica y calzado apto. Talla apropiada, que provea estabilidad y que absorba el impacto.
Abundante líquido, apropiada alimentación y descansos coordinados.
Realizar ejercicios pre y post actividad física.
La actividad previa de preparación, es imprescindible antes de practicar cualquier deporte. Complementado con ejercicios de elongación.
Ejercicios de retorno a la calma y recuperación, después de practicar deportes o hacer ejercicio, con ejercicios suaves, elongación y alimentación.
Regule el esfuerzo. No trate de hacer en uno o dos días la actividad física que corresponde a una semana. Conozca los límites de su cuerpo.
La correcta práctica del deporte, reduce el riesgo de lesiones por sobreuso.
Aumento gradual de ejercicio. Programas deportivos con entrenadores capacitados. Supervisión a cargo de profesores de educación física.
Conocer y respetar las reglas del juego.
No forzar la actividad física ante cuadros de fatiga o dolor. Y, por supuesto, no jugar lesionado.
Lic. Gustavo Gheller es Fisioterapeuta, Lic. en Kinesiología y Fisiatría, especialista en Kinefisiatría Crítica, diplomado en Kinesiología del Trabajo, Ocupacional y Laboral g.gheller@hotmail.com
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