El pasado 27 de septiembre se conmemoró el Día Nacional de la Conciencia Ambiental, con el fin de recordar cuáles son nuestros derechos y deberes constitucionales relacionados con el medio ambiente. Esta fecha fue declarada en el año 1995 con la sanción de la Ley 24.605, a raíz de un acontecimiento drástico que ocasionó la muerte de una familia por causa de inhalación de gas cianhídrico.
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¿Por qué no continuar hablando del significado que implica tener conciencia ambiental? A mi parecer, y con la experiencia vivida desde la Universidad, cada ciudadano tiene diferentes maneras de querer relacionarse con el ambiente. Podemos verlo, fuera de cualquier decreto, desde un punto de vista ideológico, cargado de fanatismo o utopías lejanas, productivo, económico o conservacionista. Pero hoy, y desde su existencia el hombre se para sobre él, buscando sobrevivir.
Cada uno desde un lugar creamos nuestra propia conciencia, que en comunidad es posible alcanzar grandes logros, a través de hábitos sustentables. Siempre que pueda ser visualizado el beneficio de una acción positiva sobre el ambiente, este será el mejor ejemplo a seguir para una sociedad.
No solo se trata de crear hábitos amigables, sino también de cuestionarnos y cuestionar qué tan correcto o efectivo es.
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Como por ejemplo:
- Implementar nuevos sistemas de energía, de comunicación, en salud o de control en el sector productivo como la nanotecnología ¿pero qué hacemos con ella cuando deje de sernos útil?
- Tirar semillas cualesquiera por todos lados, con el afán de crear más espacios verdes, puede traer otras consecuencias como transformarse en una planta invasora o cambiar de manera drástica ese sitio.
- Los residuos provenientes de las energías limpias ¿cuál será el costo en un futuro? y ¿qué está pasando hoy con los residuos que genera? O este va a ser un tema para resolver cuando estemos rodeados de basura derivadas de parques eólicos o pantallas solares.
- La minería siempre tan cuestionada, pero cada vez requerimos más minerales en nuestro cotidiano. ¿Qué está pasando hoy con el proyecto de explotación minera Potasio Río Colorado y la explotación del litio? A modo de ejemplo para nuestro país, los cuales hoy día son muy requeridos por el mercado internacional.
- La contaminación digital causada por el Internet ¿Imaginaste que usar celular, consumir redes sociales y videos por Youtube, afectaría también al ambiente? Pues sí, estudios a nivel mundial han expresado que se generan entre 0,2 y 1,45 gramos de CO2 con solo con 1 visita a una página web.
- El uso de vehículos eléctricos, recordá que funcionan a batería y esta requiere de litio el cual solo se extrae por explotación minera. A parte de ello, ¿se sabe a ciencia cierta su vida útil?
Entonces ¿qué sería mejor, crear prácticas amigables y perdurables en el tiempo y luego ver qué hacemos, cuando el problema se escape de nuestras manos? ¿O aprender de nuestros errores y paralelamente construir la solución, sin que ella sea tan costosa como en su vida útil?
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En algún momento tenemos que aprender que ante una acción positiva, como cualquier teoría del caos también hay un lado negativo difícil de prever, si lo tomamos de esa manera seríamos capaces de lograr el equilibrio.
Guillermina Porcel Tavernelli. Mujer, soñadora, curiosa e intuitiva, poseedora de pensamiento crítico casi Ingeniera en Recursos Naturales y Medio Ambiente a un paso de defender la tesis. guillerminatavernelli@gmail.com
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