German Sánchez Arias (38) supo un día que su verdadera pasión estaba en los carteles de la vía pública. Hace 10 años fundó SocialMOVE, una empresa de Publicidad Exterior que en la actualidad ya cuenta con más de 160 carteles en Santa Rosa, General Pico y Toay. Todos están distribuidos en clubes, esquinas y terrenos baldíos.
“Soy miembro de la Cámara Argentina de Empresas de Publicidad en Vía Pública y en la última Colecta Anual de Cáritas Argentina armé la campaña publicitaria en los espacios públicos”, cuenta Germán con entusiasmo a LPN.
Para poder llevar esa responsabilidad a la acción, Arias llamó a todos los colegas del país. “En total logramos distribuir 4000 afiches y 400 séxtuples. Fue la mayor donación en espacios públicos que tuvo Cáritas en la historia». Sobre esa experiencia, reconoce: «Fue una alegría y un desafío coordinar esa logística, imprimir y enviarlo a todo el país. Fue muy gratificante y todo ad honorem”, aclara.
Las ganas de ayudar, de innovar y de superarse siempre estuvieron presentes. Después de colaborar en Cáritas, se comprometió a seguir colaborando. La unión con ellos fue a partir de los carteles”, confiesa.
En estos momentos, Arias lleva adelante una campaña que marca un paradigma. Desarrolló carteles, uno de ellos está a la entrada de la Laguna Don Tomás, con un dispenser para que las personas puedan desinfectar sus manos en estos momentos de cuidados frente al coronavirus.
“Es una iniciativa nuestra de responsabilidad social. En lugar de tener el cartel vacío, prefiero que haya un desinfectante para la gente. También estamos armando otro en Avenida Luro y España”, afirma Germán.
Amor por los carteles en la vía pública
Mientras estudiaba Creatividad Publicitaria, Arias conoce en una de las clases a Oscar Canabal, su profesor de Creatividad y con amplia experiencia en distintas agencias. Años más tarde se convertiría en su socio.
“Yo tengo la idea de que el cartel está bueno, pero si no es útil, llega un momento que la gente pide que no esté por contaminación visual. Nosotros queremos hacer el esfuerzo y que sirva para la sociedad. De lo contrario, es un estorbo. El cartel tiene que tener algo«, señala.
Desde que comenzó la pandemia, instaló en Santa Rosa tres estructuras que contienen el dispenser con alcohol en gel. “Me alcanzó para animarme a hacer esas y veremos el impacto que tiene. Quiero que el cartel tenga una utilidad pública. Que los habitantes empiecen a interactuar. Ese es mi sueño”, dice.
Sobre el fúturo de SocialMOVE aclara: «No quiero sólo vender el cartel y poner las estructuras, hay todo un largo recorrido entre el contenido del cartel y la publicidad«. En ese sentido, propone diferentes alternativas: «Queremos desarrollar también el contenido. Para nosotros sería un desafío importante venderlos para la vía pública. Lo que tiene la vía pública es que las empresas lo toman como un medio más. Las campañas las hacen para televisión o para gráfica y recién después lo adaptan a la calle. Y eso es un error. La vía pública requiere de una creatividad específica«.